Hoy sin duda ha sido un gran día. La pasión por lo que haces, da sus frutos.
Nudos en la garganta y brillo en los ojos, algunos incluso lágrimas, pero lágrimas de emoción.
Para un niño el mejor regalo somos las personas que los queremos y acompañamos en su caminar.
Hoy en clase hemos recibido una sorpresa; en lugar de recoger sus mensajes del cariñograma, de sus compañeros o de su seño, hoy han recibido una carta de sus familias.
Mucha curiosidad por ver lo que decían.
Preciosos mensajes que a veces no decimos, por prisa, porque creemos que ellos los saben...
Yo, agradecida de haber podido disfrutar de tan bellos momentos.
Una educación con corazón hace los aprendizajes memorables.
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